Bolsa de plástico
¿Te encanta el pan de gambas chino? Seguro que, cuando has ido a comer a un restaurante o has hecho un pedido de entrega a domicilio, no has tardado en probarlo. Su receta original se creó en Indonesia, donde recibe el nombre de Krupuk udang. En Malasia se denomina Banh Phong Tom y en China es conocido como Keropok udang. El término Keropok es una onomatopeya que recuerda al sonido que hace el pan cuando se muerde. Es en este último país donde se consume de forma generalizada, lo que llevó a su exportación a Europa y generalizar su consumo en el continente. En Países Bajos se conoce como kroepoek y supone un guiño al pasado colonial en Asia de la nación.
Un aperitivo chino que no puede faltar
En España es frecuente que lo tomes como un aperitivo, pero para la cocina asiática se trata de una opción para probar salsas (como la agridulce o la vinagreta) y aderezarlo con especias diversas.
Otra curiosidad que te llamará la atención es que no contiene gambas. En realidad, la masa se realiza con tapioca o almidón de patata. Posteriormente, se le añade una pasta con restos de pescado o marisco para que adquiera su sabor. El tono anaranjado se lo aporta el glutamato, un potenciador de sabor muy habitual en la gastronomía china.
La masa se corta con forma cilíndrica antes de cocerla al vapor. Luego, se corta finamente para freírla en aceite muy caliente. Es el cambio de temperatura lo que provoca que aparezcan la ondulación en cada pan y el toque crujiente. Ver cómo se fríe el pan es un espectáculo, ya que la masa triplica su tamaño y adopta una forma que llama la atención de quien observa el proceso.
Pruébalo con salsa
Es importante aclarar que el pan de gambas de calidad se realiza a diario en la cocina. Solo así es posible apreciar una textura más completa, un aroma equilibrado y un sabor más agradable. Al mismo tiempo, no se trata solo de un aperitivo, aunque así lo consideres. Te animamos a que lo pruebes con una salsa picante para comprobar cómo su sabor tiene la capacidad suficiente para generar una experiencia gastronómica perfecta.
Para reconocer un pan de gambas de calidad has de repasar algunos aspectos esenciales. El primero es el tamaño, que debe resultar mediano o pequeño y manejable con los palillos que se utilizan para comer. El segundo es el color, que puede ser blanco o rosado, pero no debería tener vetas ni un tono demasiado fuerte. Y el tercero es el punto de fritura. Si se fríe demasiado, se corre el riesgo de que se endurezca demasiado y se deshaga al morderse. El punto medio se revela como el más adecuado para que el pan esté delicioso.
La próxima vez que hagas un pedido a domicilio a Restaurante Chino Gran Muralla reserva tu ración de pan de gambas. Te animamos a utilizarlo como guarnición de platos de pescado en lugar de las patatas fritas. Otra alternativa pasa por cortarlo en trozos pequeños o machácalo ligeramente para convertirlo en un ingrediente muy adecuado a la hora de rebozar pescado o verduras. Si te animas a probar nuevas opciones, cambia las clásicas tostaditas por pan de gambas la próxima vez que sirvas paté en tu casa. No tardarás en sorprender a tus invitados.
¿Has descubierto algo que no sabías del pan de gambas? Nos alegramos. De ti dependen degustarlo de forma distinta y, sobre todo, disfrutar al máximo de una receta tan simple como eficaz para que cada mordisco te lleve a recordar su historia y sus curiosidades. Entra ya en nuestra carta de platos y elige tu preferido. Disfrútalo en nuestro local en Calle Pedro Coca, 22 o pide y te lo llevamos a casa.